La semana pasada realizamos nuestro circuito de Pilates con diferentes implementos en cada estación: pesas, bosu, bandas, y glidings. Un circuito dinámico, dónde trabajamos la resistencia, la flexibilidad y la fuerza, siempre con un Cuore bien activo.

En los circuitos de pilates no solo se trabaja la parte física, también se trabaja también la coordinación y el control del movimiento, buscando un alineación correcta de nuestra columna y siempre respetando los principios fundamentales del método pilates.

El circuito se divide en diferentes estaciones y en cada una de ellas realizamos un trabajo diferente. Utilizamos las bandas elásticas, dónde trabajamos la resistencia, los bosus (qué son superficies inestables) dónde trabajamos el equilibrio, las pesas, dónde realizamos trabajo de brazos y fuerza, los discos deslizantes, dónde trabajamos la coordinación y una última estación donde realizamos trabajo abdominal sin ningún tipo de implemento.

Son ejercicios fáciles y amenos;  pero que requieren concentración para hacerlos acordes con la respiración pilates y cada alumno trabaja buscando la intensidad que le quiera dar. 

Su finalidad es trabajar todo el cuerpo para tonificarlo, fortalecer el aparato respiratorio, mejorar nuestra resistencia, nuestra fuerza y  nuestra potencia.

Cualquier persona puede realizarlo siempre adaptando los ejercicios a sus necesidades, siempre buscando la salud y el bienestar.